
¿Qué tiene de especial tener a tu perro estampado en una polera?
No quiero hablarte como fundadora y menos como vendedora; quiero hablarte como una mamá perruna que usa a diario su tote bag, su polera y poleron (según sea la temporada).
Quiero hablarte como la humana de un tierno perrito que lo ama y usa prendas con su cara para salir…
Por eso te diré por qué pienso que debes tener también una.
Cada vez que te pongas la polera, el gorro, la bolsa o el poleron… algo sentirás.
A ver… no sé explicarlo con exactitud, pero digamos que: no es solo ropa. Es tu perro, contigo.
Es una forma de llevarlo cerca cuando no puede ir.
Cuando se queda en casa, cuando sales a trabajar, cuando viajas y lo extrañas… incluso cuando se ha ido
Entonces, lo miras y sonríes.
Porque ahí está su carita, sus ojos, esa expresión que solo tú entiendes.
Cualquier otra persona verá “una polera con tu perro”, pero para ti, que también la ves, es el mundo. Es la alegría de querer volver a casa porque sabes que está ahí esperándote.
Es recordar los años que estuvo junto a ti y lo mucho que fue feliz.
Es como un pequeño ritual de amor
-Te la pones cuando quieres sentirte acompañada.
-Cuando el día pesa.
-Cuando quieres que el mundo sepa que tu corazón tiene nombre.
Y si ya tienes la prenda con su carita, entonces quizá te han preguntado por qué lo llevas en la ropa. Y no sabes siquiera explicarlo bien…
La respuesta correcta es “porque quieres y porque puedes”, pero la respuesta profunda es
que llevar a tu perro en una polera, por ejemplo, te hace sentir que todo está un poco más en su lugar. Te sientes en paz.
Te recuerda lo esencial
Su compañía, su lealtad, su forma de alegrarse por las cosas simples… Y te llenas de esa energía.
Cuando lo tienes estampado en el pecho, no es solo por estética.
Es porque verlo ahí te calma.
Es porque te hace sonreír en medio del ruido.
Es como si pudieras abrazarlo a distancia.
Como si su energía caminara contigo.
Hay quienes usan joyas.
Otros, tatuajes.
Tú elegiste llevarlo a él/ella.
Una prenda sencilla que dice tanto sin tener que decir nada.
Tu perro es parte de tu historia.
Y una polera, bolsa, gorro o poleron… es una forma hermosa de honrarlo en vida y de no olvidarlo nunca.